TOKYO.- El secretario en jefe del Gabinete nipón, Suga Yoshihide, confirmó la muerte de los siete rehenes japoneses en Bangladesh.
En rueda de prensa ofrecida minutos antes de la medianoche del sábado, el portavoz gubernamental refirió que había recibido información oficial de las autoridades bangladesíes.
El viernes por la noche, un comando militar del grupo terrorista Estado Islámico irrumpió en el restaurante «Holey Artisan Bakery» de la ciudad de Dacca, el barrio diplomático de la capital de Bangladesh, frecuentado por extranjeros.
Doce horas después, las fuerzas de seguridad bangladesíes ingresaron al local por la fuerza. Con un saldo de 20 rehenes fallecidos (aunque la prensa internacional afirma que fueron ejecutados por los rebeldes) y seis de los siete terroristas. También murieron dos policías.
Horas antes, fueron rescatados trece rehenes, entre ellos el japonés Watanabe Tamaoki cuya vida no corre peligro.
El nipón quien labora en Almec Corporation estaba cenando con otros siete compatriotas. Todos trabajaban en distintas empresas involucradas en un proyecto de la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA)
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