TOKIO.- Una centenaria australiana saltó en paracaídas para recaudar fondos para financiar una investigación para encontrar la cura a una enfermedad.
Se trata de Irene O’Shea (102) quien hace una década perdió a su hija quien padecía una enfermedad de la neurona motora.
Según a prensa local, el último fin de semana la anciana se lanzó, en compañía de un instructor, de una altitud de 4.300 metros y descendió a una velocidad de 220 kilómetros por hora.
La bisabuela anunció que si continúa con vida volverá a repetir la hazaña el próximo año.
EL DATO
Irene O’Shea se convirtió en la persona de mayor edad en realizar un saltó en paracaídas.
© Noticias Nippon