TOKIO.- Cerca de tres millares de personas disfrutaron de un tradicional ritual en la región de Kantō.
Se trató del Yoshiyaki en los humedales Watarase Yūsuichi que abarca un área que comprende las prefecturas de Tochigi, Ibaraki, Gunma y Saitama y las ciudades de Oyama y Nogi-cho.
Organizado por el Wataraseyūsuichi Yoshi-yaki renraku-kai (Comité de enlace de quema de juncos del embalse de Watarase) propósito de preservar plantas raras y exterminar enfermedades y plagas.
Se inició a las 8:30 de la mañana y a los pocos minutos las llamas y humo negro se extendieron a lo largo de las 1 500 hectáreas planificadas.
EL DATO
Watarase Yūsuichi es un vasto humedal de 3 300 hectáreas y un vibrante hábitat de vida silvestre. Centrado en un vasto lago en forma de corazón, fue diseñado durante la revolución industrial nipona como una cuenca de detención.
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