TOKIO.- El 18 de septiembre, un niño japonés fue atacado por un hombre mientras se dirigía a la escuela japonesa en Shenzhen, provincia de Guangdong, al sur de China.
El niño fue apuñalado y trasladado a un hospital donde recibe tratamiento. Las autoridades chinas han detenido al sospechoso y están investigando el incidente.
El ataque tuvo lugar a unos 200 metros de la escuela a la que el niño asistía.
En una conferencia de prensa, el vicesecretario jefe del gabinete japonés, Moriya Hiroshi, expresó que, desde la perspectiva de la protección de ciudadanos japoneses, se ha solicitado a las autoridades locales que eviten futuros incidentes y compartan información detallada sobre lo ocurrido.
Un portavoz del gobierno local de Shenzhen declaró que el estado de salud del niño es grave
Este no es el primer caso de ataques a japoneses en China. En junio pasado, una madre japonesa y sus hijos fueron atacados con un cuchillo por un hombre chino en Suzhou, provincia de Jiangsu.
En respuesta a estos eventos, el gobierno japonés ha reiterado a las autoridades chinas la necesidad de garantizar la seguridad de sus ciudadanos en el país.
El ataque en Shenzhen ocurrió el mismo día en que China conmemoraba el 93 aniversario del incidente de Liutiaohu, un evento que marcó el inicio de la invasión japonesa a Manchuria en 1931.
Este día, conocido como el «Día de la Humillación Nacional» en China, suele ser una fecha en la que aumentan los sentimientos antijaponeses, aunque las autoridades no han establecido una relación directa entre este hecho y el ataque al menor japonés.
EL DATO
Shenzhen, conocida por ser un centro de la industria tecnológica en China, alberga muchas empresas japonesas, lo que incrementa la preocupación por la seguridad de los residentes japoneses en la región.
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