TOKIO.- El gobierno japonés ha decidido reducir nuevamente los subsidios destinados a controlar el precio de la gasolina, con efecto a partir del 16 de enero de 2025.

Esto llevará a un incremento en el precio promedio nacional de la gasolina regular, que pasará de los 180 yenes actuales  a aproximadamente 185 yenes por litro.

Esta medida se enmarca en un esfuerzo por reducir gradualmente el gasto gubernamental en subsidios que se implementaron como una respuesta de emergencia a la inflación energética global.

 


Contexto y antecedentes


Los subsidios al precio de la gasolina se introdujeron en enero de 2022 como una medida de contención frente a la volatilidad en los mercados internacionales de energía.

La crisis fue exacerbada por el conflicto entre Rusia y Ucrania, lo que generó aumentos drásticos en los costos de importación de petróleo, del cual Japón depende en gran medida.

Estos subsidios buscaban aliviar la presión económica sobre los hogares y las empresas, especialmente en las zonas rurales, donde la dependencia de los vehículos particulares es alta.

Inicialmente, el gobierno había planificado concluir el programa de subsidios a finales de 2024. Sin embargo, debido a la persistencia de altos precios en los combustibles, se optó por prolongar la medida.

Desde diciembre de 2024, el monto de los subsidios comenzó a disminuir, y esta reducción continuará en 2025 como parte de un plan de ajuste.

 


Impacto esperado


  • Incremento en el precio de la gasolina: 
    La disminución de los subsidios generará un aumento directo en el precio por litro de gasolina, afectando a los consumidores y aumentando los costos de transporte y logística.
  • Mayor presión en las zonas rurales:
    Las regiones rurales, donde el transporte público es limitado y el uso de vehículos particulares es esencial, sentirán más fuertemente el impacto. Tanto las familias como las pequeñas y medianas empresas (PYMES) enfrentarán mayores costos operativos, lo que podría repercutir en el aumento de precios de productos básicos y servicios.

 


Análisis y proyecciones


  • Impacto en la inflación:
    El alza en el precio del combustible se traducirá en un incremento generalizado de precios en otros sectores, como alimentos y productos de consumo. Esto podría dificultar los esfuerzos del Banco de Japón por mantener la inflación en niveles controlados.
  • Estrategias compensatorias del gobierno:*

Ante las preocupaciones por el impacto económico, se espera que el gobierno implemente medidas alternativas, como la promoción de vehículos eléctricos, el impulso al transporte público y políticas de apoyo a las regiones rurales.

  • Desafíos energéticos internacionales:
    Japón enfrenta dificultades para diversificar sus fuentes de energía, lo que lo hace vulnerable a las fluctuaciones de precios globales. A mediano plazo, el país busca reducir esta dependencia mediante inversiones en energías renovables y acuerdos internacionales para asegurar un suministro energético más estable.

 


Conclusión:


La decisión de reducir los subsidios a la gasolina refleja el desafío que enfrenta Japón al equilibrar la estabilidad económica doméstica con las presiones fiscales.

 


EL DATO

Aunque el ajuste puede ser necesario desde una perspectiva presupuestaria, es crucial que el gobierno adopte medidas adicionales para proteger a los sectores más vulnerables y mitigar el impacto inflacionario.

 




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