LAOS.- El primer ministro japonés, Ishiba Shigeru, se reunió  su homólogo chino, Li Qiang, en el marco de las reuniones de la ASEAN, manteniendo una conversación de 35 minutos en la que se abordaron temas críticos para ambas naciones.

Durante este encuentro, Ishiba expresó una fuerte preocupación por las crecientes actividades militares de China cerca de Japón, específicamente en relación con la incursión de aviones militares chinos en el espacio aéreo japonés, exigiendo una explicación al respecto.

A pesar de las tensiones, ambos líderes reiteraron la importancia de promover una «relación estratégica de beneficio mutuo» y se comprometieron a profundizar en la cooperación bilateral en diversos ámbitos.

Esta reunión es significativa ya que marca el primer encuentro de Ishiba, recién nombrado primer ministro, con un alto funcionario del gobierno chino.

Durante la reunión, Ishiba destacó el potencial de cooperación entre ambos países, pero también subrayó la existencia de desafíos que deben abordarse a través de los esfuerzos de ambos gobiernos.

Li, por su parte, elogió la postura de Ishiba de seguir impulsando la relación estratégica con China y de fomentar el diálogo a todos los niveles.

Un tema importante que Ishiba puso sobre la mesa fue la investigación del asesinato de un niño japonés en China, exigiendo esclarecimiento del caso.

Además, instó a China a acelerar la reanudación de las importaciones de productos pesqueros japoneses, acordada previamente entre ambas naciones.

Sin embargo, la respuesta de Li no ofreció avances significativos respecto a la posición previa del gobierno chino.

Este encuentro ocurre en un contexto de creciente actividad militar china en la región desde que Kishida Fumio, el anterior primer ministro japonés, anunciara su dimisión a mediados de agosto.

Desde entonces, se han registrado movimientos notables como la incursión de aviones de reconocimiento chinos en el espacio aéreo japonés y la entrada del portaaviones Liaoning en aguas cercanas a Okinawa.

Durante la campaña para liderar el Partido Liberal Democrático, Ishiba criticó duramente estas acciones, calificándolas de inaceptables y demandando una respuesta firme del gobierno japonés.

Aunque en la reunión no se discutió la propuesta de Ishiba sobre la creación de una versión asiática de la OTAN, ambos líderes acordaron fortalecer la colaboración en áreas como el medio ambiente y la salud, y utilizar el diálogo económico de alto nivel como una herramienta clave.

Japón también busca organizar una cumbre entre Ishiba y Xi Jinping, presidente chino, en noviembre durante una conferencia internacional, lo que subraya el interés de Japón en mejorar las relaciones bilaterales.

Por su parte, el gobierno chino está evaluando la política exterior y de seguridad de Ishiba, dado su historial de estrechos lazos con Taiwán, lo cual genera cautela en Pekín, que no ha descartado la reunificación de Taiwán por la fuerza.

Antes de la reunión con Li, Ishiba asistió a la cumbre de líderes de la ASEAN, donde subrayó el creciente deterioro del entorno de seguridad en la región del Indo-Pacífico.

Con un claro mensaje dirigido a China, manifestó su oposición a las continuas acciones provocadoras y violaciones de la soberanía japonesa en el mar de China Oriental, así como su preocupación por la militarización y las actividades coercitivas en el mar de China Meridional.

En conclusión, la reunión entre Ishiba y Li se centró en buscar un equilibrio entre la cooperación bilateral y la necesidad de abordar las preocupaciones de seguridad que Japón tiene frente a las crecientes actividades militares chinas en la región, reflejando las tensiones geopolíticas actuales en Asia.

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