[ishiba shushō] «Silencio mi ego por el bien de Japón»

“Sin una pizca de egoísmo, me entrego al país”: Ishiba insiste en seguir como primer ministro

📍Tōkyō  |  27 de Julio de 2025

En un momento en que su continuidad como primer ministro pende de un hilo, Ishiba Shigeru decidió hablar. Lo hizo en tono sereno, pero con palabras que revelan el peso del cargo, la presión interna y el desgaste emocional de quien siente que gobierna con el tiempo contado.

En una entrevista concedida a la NHK, el jefe de gobierno japonés aseguró que cumplirá con responsabilidad el reciente acuerdo alcanzado con Estados Unidos sobre los aranceles a productos japoneses. Pero más allá de los temas comerciales, lo que dejó clara fue su convicción de mantenerse al frente del Ejecutivo pese a las crecientes presiones dentro de su propio partido.

📦 El acuerdo con EE. UU.: alivio para exportadores, reto político para Ishiba

“El acuerdo con Estados Unidos no es una meta, sino un punto de partida”, afirmó Ishiba, al referirse al pacto que busca poner fin a las restricciones arancelarias a más de 4.300 productos japoneses.

El mandatario hizo especial énfasis en la necesidad de proteger a los sectores más vulnerables: pequeñas y medianas empresas y trabajadores autónomos que dependen de ese comercio.

🗣️ “Ahora es cuando comienza la parte difícil. La implementación requiere responsabilidad y un compromiso real con quienes producen en Japón”, sostuvo.

En un país en el que el comercio exterior es vital para mantener el empleo, las cadenas de suministro y la estabilidad regional, Ishiba busca dejar un legado de estabilidad en medio de una administración marcada por desafíos internacionales y una erosión interna constante.

🧍‍♂️ Un liderazgo cuestionado, pero no resignado

La entrevista no eludió el tema que domina hoy las conversaciones políticas en Tokio: la posibilidad de que Ishiba sea reemplazado como líder del Partido Liberal Democrático (PLD) antes del final de su mandato. Varios parlamentarios están impulsando una reunión anticipada para discutir su sucesión, argumentando que los recientes resultados electorales fueron una señal de desgaste.

Pero Ishiba fue tajante:

“Lo más importante es el interés nacional. Si pensara sólo en mí, tal vez habría tomado otro camino. Pero como primer ministro, tengo que silenciar mi ego. No se trata de aferrarse al poder. Es una entrega. Me borro como individuo para actuar por el bien del país”.

Su frase más poderosa —»me entrego al país, sin una pizca de egoísmo»— fue tanto un mensaje al público como un recordatorio a su partido: que su permanencia, según él, no responde a vanidad sino a una noción de responsabilidad histórica.

💴 El costo de la vida y el debate fiscal: llamado al diálogo con la oposición

Ishiba también abordó otro de los temas que más preocupan a los hogares japoneses: la inflación y el alza sostenida de los precios. Lamentó que durante la campaña para la Cámara Alta no se haya profundizado en propuestas concretas:

“Se habló de dar ayudas o reducir impuestos, pero no se discutió lo suficiente qué pasará con la seguridad social o las pensiones”.

Cuando se le preguntó si consideraría la propuesta de la oposición de reducir el impuesto al consumo (shōhizei), Ishiba no la descartó, pero puso condiciones claras:

🗣️ “Si hay quienes creen que podemos reducir el impuesto sin poner en peligro la estabilidad fiscal o el sistema de salud, que presenten datos. Lo que necesitamos es un debate basado en evidencia, no en slogans de campaña”.

🔍 Contexto: un primer ministro entre la presión, la convicción y la cuenta regresiva

Ishiba llegó al poder con la promesa de restaurar la confianza en la política japonesa tras años de escándalos y gobiernos inestables. Sin embargo, su estilo sobrio y su enfoque en la gestión técnica no han logrado entusiasmar a un electorado fatigado, y ahora su propio partido debate si es tiempo de pasar página.

Mientras tanto, Ishiba se aferra no al cargo, sino —según sus propias palabras— al deber. “La forma correcta de asumir la responsabilidad no es huir, sino terminar lo que se empezó por el bien de Japón”, dijo.

Y esa es, quizás, la línea que mejor resume el estado emocional y político de un primer ministro que ha elegido resistir.

©NoticiasNippon