📍Tōkyō | 12 de mayo de 2025


Hoy lunes, Japón conmemora el Kango nō hi「看護の日」(Día de la Enfermería), una fecha dedicada a reconocer el valor humano, profesional y social de quienes, día a día, cuidan de los demás desde hospitales, clínicas, hogares y centros comunitarios.

Esta jornada, que se enmarca en la llamada “Semana de la Enfermería”, es también un recordatorio del legado de la pionera británica Florence Nightingale, nacida precisamente un 12 de mayo de 1820.

 


Un día con rostro humano: origen y significado en Japón


El Día de la Enfermería fue establecido oficialmente en 1990 por el entonces Ministerio de Salud y Bienestar (actual Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar).

La propuesta nació del movimiento de académicos y figuras culturales agrupadas en el comité Kango no hi no seitei o negau kai「看護の日の制定を願う会」(Comité por el Establecimiento del Día de la Enfermería), que ese mismo año solicitó al gobierno crear una jornada para destacar la importancia del trabajo de las enfermeras y enfermeros en la sociedad japonesa.

El objetivo no era solo honrar una profesión, sino también cultivar en la ciudadanía el espíritu de empatía, solidaridad y cuidado mutuo, valores centrales en la cultura japonesa.

Desde entonces, el 12 de mayo se celebra cada año como el punto central de la “Semana de la Enfermería”, que va del domingo al sábado de esa misma semana.

Durante estos días, hospitales, universidades, asociaciones de salud y gobiernos locales organizan actividades públicas como:

•Clases abiertas de enfermería en escuelas

•Talleres de primeros auxilios

•Visitas guiadas a hospitales y centros de salud

•Experiencias prácticas de cuidado para estudiantes

•Charlas sobre el rol de la enfermería en emergencias y desastres naturales

Estos eventos no solo buscan educar al público, sino también acercar emocionalmente a la sociedad japonesa a una labor que, aunque muchas veces silenciosa, sostiene la salud y la dignidad de millones de personas.

 


Un homenaje en nombre de Nightingale


El 12 de mayo fue elegido también por coincidir con el cumpleaños de Florence Nightingale, considerada la fundadora de la enfermería moderna.

Su legado humanista, basado en la entrega total a los enfermos durante la Guerra de Crimea y en la implementación de reformas sanitarias basadas en datos estadísticos, ha sido profundamente admirado en Japón.

Nightingale no solo representa el cuidado físico, sino también el compromiso ético con el bienestar de los demás, un ideal que ha inspirado la formación de generaciones de enfermeras japonesas.

 


Japón y su propia historia de enfermería


En Japón, la figura de la enfermera (antiguamente llamada 看護婦 kangofu, hoy 看護師 kangoshi) ha evolucionado junto con los cambios sociales y médicos del país.

Desde el apoyo a los soldados en la era Meiji hasta el rol clave en la gestión de pandemias y desastres naturales como terremotos, tifones o accidentes nucleares, el personal de enfermería ha sido un pilar en la atención en situaciones de crisis.

El respeto hacia esta profesión también se refleja en la cultura japonesa. Muchas enfermeras son vistas como “ángeles blancos” (白衣の天使) no solo por su uniforme, sino por su dedicación desinteresada a los demás.

 


Celebración en un Japón envejecido


Este día adquiere especial relevancia en la actualidad, cuando Japón enfrenta un rápido envejecimiento de su población y una creciente necesidad de cuidados geriátricos, paliativos y comunitarios.

Las y los enfermeros, en este contexto, no solo trabajan en hospitales, sino también en hogares, residencias de ancianos y en visitas domiciliarias, lo que los convierte en figuras clave del sistema de salud del futuro.

 


Un llamado a valorar el cuidado


El Día de la Enfermería es más que una celebración institucional: es una oportunidad para detenernos y decir “gracias” a quienes nos acompañan en nuestros momentos más vulnerables.

También es una invitación a reflexionar sobre el valor del cuidado humano en una sociedad tecnológica, a reconocer que detrás de cada tratamiento hay alguien que escucha, que acompaña, que sostiene la mano de un paciente, a veces en silencio, pero con total entrega.

Hoy, desde Okinawa hasta Hokkaido, muchas enfermeras y enfermeros seguirán trabajando, con mascarilla y guantes, sin festejos ni discursos. Pero el país entero los honra con respeto, gratitud y admiración.

 



©NoticiasNippon

Copy Protected by Chetan's WP-Copyprotect.