TOKIO.- Toyota Motor Corporation anunció oficialmente que no renovará su contrato como patrocinador de alto nivel con el Comité Olímpico Internacional (COI) para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, siendo los Juegos de París de este verano los últimos en los que participará bajo este acuerdo.

Toyoda Akio, presidente de la compañía, hizo esta declaración a través de su medio oficial «Toyota Times».

A pesar de la decisión, la empresa continuará apoyando directamente a los atletas y mantendrá su compromiso con el Comité Paralímpico Internacional (IPC) a través del Toyota Mobility Foundation, fundación dirigida por Toyoda.

Toyota ha sido patrocinador olímpico desde 2015, con un contrato vigente hasta diciembre de 2024, que cubre un periodo de 10 años.

Sobre la decisión de no renovar, Toyoda expresó su inquietud acerca de si el evento sigue siendo centrado en los atletas, señalando un aumento en la influencia política en los Juegos y cuestionando si este enfoque es adecuado para la empresa.

Sus declaraciones dejan entrever una insatisfacción con la dirección actual de la organización de los eventos olímpicos.

En un principio, Toyota había mostrado interés en extender su patrocinio solo para los Juegos Paralímpicos, pero el COI rechazó esta posibilidad, ya que no permite acuerdos exclusivos solo para esta competencia.

Se cree que la decisión de no renovar el patrocinio también está influenciada por la percepción de que los fondos destinados al patrocinio no se están distribuyendo adecuadamente para apoyar el desarrollo deportivo ni a los atletas.

Contexto

Toyota ha sido un aliado crucial del movimiento olímpico y paralímpico, especialmente en lo relacionado con la movilidad sostenible y el apoyo a los atletas paralímpicos.

La empresa ha jugado un papel importante en los Juegos, no solo como patrocinador, sino también a través de innovaciones tecnológicas como vehículos autónomos y soluciones de movilidad diseñadas para mejorar la accesibilidad.

La decisión de no renovar el contrato refleja una tendencia en la que las grandes corporaciones reconsideran su rol en eventos globales que han sido criticados por su creciente politización y los altos costos asociados.

El comentario de Toyoda sobre si los Juegos realmente están priorizando a los atletas («athlete first») pone de relieve la creciente tensión entre los valores originales del olimpismo y las dinámicas comerciales y políticas contemporáneas.

Al continuar apoyando al IPC a través de su fundación, Toyota reafirma su compromiso con los valores de inclusión y accesibilidad que caracterizan a los Juegos Paralímpicos, lo que refuerza la idea de que la empresa se mantiene comprometida con los atletas y su bienestar, aunque con un enfoque diferente.

Esto también puede verse como una estrategia de relaciones públicas que permite a la empresa seguir asociada a los ideales del deporte sin verse involucrada en los aspectos más controvertidos de los Juegos Olímpicos.

En resumen, la decisión de Toyota de finalizar su patrocinio olímpico, mientras mantiene su apoyo al deporte paralímpico, refleja tanto una crítica a la dirección que han tomado los Juegos Olímpicos como una reafirmación de sus valores centrados en la movilidad y el apoyo a los atletas.

 

EL DATO

Hace unas semanas, el gigante electrónico Panasonic anunció una decisión similar.



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