TOKIO.- La princesa Kako, hija del príncipe Akishino y la princesa Kiko, celebra hoy domingo su 30.º cumpleaños, marcando un hito importante en su trayectoria dentro de la familia imperial japonesa.

Este aniversario sirvió para reflexionar sobre su creciente compromiso con causas sociales y culturales, así como su sensibilidad hacia las adversidades que enfrenta Japón.

 


Un año de compromiso con la sociedad y la cultura


La Agencia de la Casa Imperial destacó en su informe anual la expansión de las actividades oficiales de la princesa durante 2024. Entre sus principales compromisos se incluyen:

Desastres naturales y apoyo comunitario:

La princesa expresó su preocupación por los desastres naturales que han afectado recientemente al país, como los terremotos y lluvias torrenciales en la península de Noto. Durante su visita a Ishikawa en octubre, consoló a artesanos de lacado tradicional Wajima y a comunidades afectadas, mostrando empatía y solidaridad hacia los esfuerzos de recuperación.

Conexión con la tradición japonesa:

En su papel como presidenta honoraria de la Asociación Japonesa de Artesanías, la princesa participó en eventos como la Exposición de Artesanías Tradicionales en Kanazawa. Su presencia resaltó la importancia de preservar el patrimonio cultural, mientras ofrecía su apoyo a quienes enfrentan desafíos económicos y sociales.

Reconstrucción y revitalización regional:

Durante una visita a Fukushima, conoció los esfuerzos por reabrir la línea ferroviaria JR Tadami, un proyecto que tomó más de una década tras los desastres naturales. Subrayó el valor de la conexión comunitaria y la resiliencia local.

Diplomacia y presencia internacional

En mayo, la princesa realizó su primera visita oficial al extranjero, viajando a Grecia para conmemorar los 125 años de relaciones diplomáticas entre ambos países. Este viaje destacó su preparación y su capacidad para representar a Japón en la escena internacional, fortaleciendo los lazos de amistad entre ambas naciones.


Compromiso social continuo


La princesa Kako mantiene un equilibrio entre sus deberes oficiales y su trabajo en la Federación Japonesa de Sordos, donde colabora en tareas administrativas.

Aunque ha reducido su asistencia presencial a dos días por semana debido a su creciente agenda pública, sigue priorizando el uso y promoción del lenguaje de señas, demostrando un compromiso constante con la inclusión y la accesibilidad.


Reflexión personal y legado


La princesa también recordó con afecto a la fallecida princesa Yuriko, cuya amabilidad y dedicación dejaron una huella en su infancia. Este homenaje refleja la importancia de las generaciones anteriores en su formación y valores.

 


Perspectivas futuras


A sus 30 años, Kako se perfila como una figura clave dentro de la familia imperial, con un enfoque en temas contemporáneos como la igualdad de género, la inclusión social y la revitalización cultural.

Aunque los medios especulan sobre aspectos personales, como posibles compromisos matrimoniales, la princesa ha mantenido su atención en las prioridades sociales, preparando el camino para asumir mayores responsabilidades en el futuro.

 


EL DATO

El aniversario subraya la evolución de la princesa Kako como una representante moderna de la familia imperial, comprometida con las necesidades y aspiraciones de la sociedad japonesa en tiempos desafiantes.

 


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