TOKIO.- El Índice de Precios de las Empresas (PPI) en Japón alcanzó en 2024 un nuevo récord histórico por tercer año consecutivo, situándose en 122.6 puntos según el Banco de Japón (BoJ), con base en los niveles promedio de 2020 (100 puntos).
Esto representa un aumento del 2.3 % respecto al año anterior y marca el cuarto año consecutivo de incrementos en esta métrica.
El informe destaca cómo factores como la depreciación del yen, el encarecimiento de materias primas y el aumento de costos laborales se trasladaron a los precios interempresariales, lo que a su vez impacta los precios al consumidor.
Factores clave del incremento
- Depreciación del yen: El tipo de cambio alcanzó niveles históricos, como los 161 yenes por dólar en verano de 2024, encareciendo significativamente las importaciones.
- Aumento de precios de materias primas: Especialmente en sectores estratégicos como:
- Metales no ferrosos: El precio del cobre y el aluminio subió un 12.2 %, impulsado por mercados internacionales.
- Agricultura, silvicultura y pesca: Los costos de productos básicos, como el arroz, se incrementaron en un 9.7 %.
- Alimentos y bebidas: Subieron un 2.6 % debido al alza de precios de insumos.
Sectores con descensos
A pesar del aumento generalizado, algunos sectores mostraron reducciones en sus índices de precios:
- Madera y productos de madera: Cayeron un 4.0 % debido a la desaceleración en la demanda del sector de la construcción de viviendas.
- Energía: Los precios de electricidad, gas urbano y agua disminuyeron un 5.2 %, reflejando menores costos de insumos como el gas natural licuado (GNL) y el carbón.
Impacto de las importaciones
El índice de precios de importación (en yenes) subió un 2.7 % respecto al año anterior, evidenciando cómo la fuerte depreciación de la moneda japonesa encareció los bienes importados.
Perspectivas del Banco de Japón
El Banco de Japón enfatizó que las empresas han acelerado la transferencia de costos de producción al precio final de sus productos debido a la combinación de la depreciación del yen y el aumento de los costos laborales y de materias primas. Además, subrayó la importancia de continuar monitoreando:
- La evolución de las estrategias de fijación de precios por parte de las empresas.
- Las tendencias en los mercados internacionales de materias primas.
Conclusiones
El récord en el índice PPI refleja un contexto económico desafiante, caracterizado por una inflación persistente en sectores clave y desequilibrios derivados de la debilidad del yen.
EL DATO
Aunque algunos sectores han logrado reducir costos, el panorama general sigue mostrando presiones inflacionarias significativas, que probablemente continúen impactando tanto a las empresas como a los consumidores en 2025.
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