TOKIO.- El gobierno japonés celebró una reunión extraordinaria del gabinete para decidir la disolución de la Cámara de Representantes.
El primer ministro , Ishiba Shigeru, junto con todos los ministros, firmaron el decreto para llevar a cabo esta disolución el mismo día, marcando el inicio de una nueva etapa política.
Este evento se considera uno de los más rápidos en la historia de Japón después de la Segunda Guerra Mundial, ya que solo han pasado 8 días desde la toma de posesión del nuevo jefe de gobierno.
La sesión de la Cámara de Representantes, donde el presidente de la cámara, Nukaga, leerá el decreto de disolución, está programada para las 3:30 de la tarde, momento en el cual la cámara quedará oficialmente disuelta.
Posteriormente, el gobierno llevará a cabo otra reunión del gabinete para confirmar el calendario de las elecciones generales.
La campaña electoral comenzará el 15 de octubre, y las elecciones se celebrarán el 27 del mismo mes, lo que significa que el proceso electoral será particularmente rápido.
Este adelanto marca el inicio de una intensa carrera electoral, con todos los partidos políticos entrando en modo de campaña completa inmediatamente después de la disolución de la cámara.
Los principales temas que probablemente dominarán la campaña incluyen la recuperación económica pospandemia, las relaciones exteriores de Japón, y las reformas internas necesarias para afrontar los desafíos demográficos y energéticos del país.
El hecho de que la disolución se haya producido tan pronto después del nombramiento de Ishiba sugiere que el mandatario busca consolidar su posición y obtener un mandato claro del electorado, dado que el actual parlamento ha sido visto como disfuncional por las divisiones internas.
EL DATO
El éxito de esta estrategia dependerá en gran medida de cómo los partidos opositores y el propio gobierno aborden los temas más urgentes para la población.
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