TOKIO.- La Agencia de la Casa Imperial  informó sobre el estado de salud de la princesa Yuriko de Mikasa, quien, a sus 101 años, continúa en tratamiento en una habitación general del hospital   en su deterioro funcional general.

A pesar de su frágil estado, la princesa muestra estabilidad en su condición. Yuriko, la miembro más longeva de la familia imperial japonesa desde la era Meiji, fue ingresada al Hospital Internacional St. Luke en Tokio en marzo de este año debido a un infarto cerebral y una neumonía por aspiración, ambos problemas graves dada su edad avanzada.

Hoy domingo 10 de noviembre, varios miembros de la familia imperial, incluyendo sus nietas, las princesas Akiko y Yoko, y la princesa Hisako de Takamado, visitaron a Yuriko en el hospital, en una muestra de apoyo familiar.

La Agencia de la Casa Imperial había comunicado previamente, el 8 de noviembre, que la princesa sufre de un deterioro en funciones de órganos clave, como el corazón y los riñones, debido a su longevidad.

Sin embargo, el hecho de que permanezca en una habitación general, y no en cuidados intensivos, sugiere una estabilidad relativa a pesar de la vulnerabilidad de su salud.

Este caso ha captado la atención del público en Japón, no solo por la avanzada edad de la princesa, sino también por su rol como símbolo de longevidad y de la continuidad de la familia imperial.

EL DATO

Resalta el cuidado especial y la consideración que se brinda a los miembros mayores de la realeza, en línea con el respeto que la cultura japonesa tiene hacia sus ancianos y sus tradiciones.




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