TOKIO.- El primer ministro Ishiba Shigeru inició un nuevo periodo en el cargo, que asume tras los resultados de las elecciones generales recientes.
A través de un mensaje difundido por la Oficina del Gabinete, expresa su compromiso de recibir el veredicto de la ciudadanía con humildad y seriedad.
Reafirma su responsabilidad de liderar el gobierno de coalición entre el Partido Liberal Democrático y el partido Komeito, buscando la cooperación y comprensión de todas las fuerzas políticas para evitar el estancamiento de la administración del país.
El enfoque de su mandato se estructura en torno a cinco pilares fundamentales:
1.Respetar las reglas
2.Proteger a Japón
3.Defender a la ciudadanía
4.Apoyar a las regiones
5.Garantizar oportunidades para los jóvenes y mujeres
Estos pilares guiarán sus acciones para construir y proteger el futuro de Japón, con la visión de “crear una nueva era para la nación”.
Entre las prioridades de su política, destacan varias áreas estratégicas:
•Diplomacia y defensa: Fortalecimiento sustancial de la capacidad de defensa de Japón en un contexto de “beneficio nacional realista”, lo que sugiere una postura práctica y de adaptación a los retos internacionales actuales.
•Economía de crecimiento: Implementar un modelo económico impulsado por aumentos salariales y mayores inversiones.
•Revitalización regional: Impulsar un nuevo esfuerzo para reactivar las economías y la infraestructura de las zonas fuera de las grandes urbes.
•Construcción de un país resistente a desastres: Adoptar políticas enfocadas en la protección de vidas y en la preparación ante desastres naturales, dada la vulnerabilidad del país en este ámbito.
El jefe de gobierno resalta que su enfoque estará basado en una comunicación honesta y sincera con la ciudadanía, con un liderazgo humilde, cálido y eficaz.
Política Básica
La administración del primer ministro Ishiba estableció objetivos concretos para fortalecer la seguridad, economía, y cohesión social del país, con un enfoque en proteger la nación, la ciudadanía, las regiones y las oportunidades para jóvenes y mujeres.
A continuación, un resumen de los puntos principales:
1.Defender a Japón: En respuesta al cambiante entorno de seguridad, Japón busca reforzar su defensa mediante una diplomacia que priorice los intereses nacionales y la alianza con Estados Unidos. Esto incluye la promoción de un Indo-Pacífico libre y abierto y la mejora de la seguridad regional. Se plantean medidas como el fortalecimiento de la capacidad de defensa, la mejora de las condiciones de los soldados, y el refuerzo de la ciberseguridad.
2.Proteger a la ciudadanía: Japón enfocará su política económica en la recuperación posdeflación, apostando por una economía impulsada por aumentos salariales y fuertes inversiones en sectores de crecimiento. El gobierno promoverá un modelo económico de alto valor añadido y una política energética sostenible. Además, se fortalecerá la seguridad social para responder a diversas necesidades de vida y se desarrollará un sistema de protección contra desastres con la creación de una Agencia de Gestión de Desastres.
3.Apoyar a las regiones: Japón impulsará una “Renovación Regional 2.0” para revitalizar las áreas rurales y adaptarse a los desafíos del envejecimiento y la disminución poblacional. Se creará un plan de desarrollo para estas áreas, priorizando la integración y eficiencia de las políticas interministeriales y duplicando el presupuesto de apoyo para el año fiscal 2025. Además, se busca mejorar sectores clave como la agricultura, la pesca y el turismo, al tiempo que se fomenta una sociedad regional inclusiva y diversa.
4.Proteger las oportunidades para jóvenes y mujeres: El gobierno japonés promoverá una sociedad donde todas las personas puedan acceder a una educación adecuada y donde las mujeres tengan participación activa en la toma de decisiones. La visión es crear una sociedad que respete y garantice los derechos y la felicidad de todos, con especial atención a las necesidades y oportunidades de los jóvenes y mujeres.
EL DATO
Ishiba en su compromiso incluye un énfasis en lograr la confianza y empatía de la población, estableciendo un vínculo de consenso y transparencia con los ciudadanos.
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