TOKIO.- En 2023, Japón registró 14,663 casos de sífilis, según cifras preliminares del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (NIID).
Esta cifra es la segunda más alta desde que se comenzaron a recopilar datos con el método actual, solo superada por los 14,906 casos reportados en 2022.
Esto indica que la epidemia no ha disminuido. Los expertos subrayan la importancia de la detección temprana y el tratamiento para controlar la propagación.
Distribución geográfica de los casos
La mayoría de los casos se concentraron en las grandes ciudades, con las siguientes cifras destacadas:
- Tokio: 3,703 casos
- Osaka: 1,906 casos
- Fukuoka: 880 casos
- Aichi: 846 casos
Sin embargo, también se registró un aumento significativo en regiones menos urbanizadas. Las prefecturas con mayores tasas de incremento fueron:
- Toyama: 1.96 veces más casos (47 en total)
- Shimane: 1.52 veces más (35 casos)
- Ishikawa: 1.48 veces más (83 casos)
- Tottori: 1.43 veces más (40 casos)
Esto demuestra que la propagación ya no es exclusiva de las áreas metropolitanas.
¿Qué es?
La sífilis es causada por la bacteria Treponema pallidum y se transmite principalmente a través del contacto sexual.
A menudo provoca bultos en los genitales, seguidos de ganglios linfáticos hinchados y erupciones en todo el cuerpo.
En caso de no tratarse de manera adecuada, la sífilis puede desarrollar complicaciones graves en el cerebro y el corazón, pero es posible una cura completa si se administra el tratamiento adecuado en una etapa temprana.
Si las mujeres embarazadas se infectan, sus bebés podrían nacer con anomalías.
- Síntomas iniciales: Erupciones cutáneas, úlceras o heridas en las áreas afectadas.
- Complicaciones severas: Si no se trata a tiempo, puede provocar pérdida de visión o problemas de movilidad, entre otros.
Recomendaciones de los expertos
- Importancia de la detección temprana: Ante cualquier signo sospechoso, como erupciones en los genitales o en las manos, es vital buscar atención médica.
- Necesidad de tratamiento inmediato: Mientras existan personas infectadas sin tratar, la enfermedad seguirá propagándose.
Conclusión
La sífilis sigue siendo un problema de salud pública en Japón, especialmente en áreas urbanas, aunque también está afectando a regiones rurales.
EL DATO
La clave para frenar esta epidemia de sífiles es la detección temprana, la educación sexual y la accesibilidad al tratamiento médico.
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