📍Ōsaka | 2 de mayo de 2025
Una tragedia estremecedora sacudió el distrito de Nishinari cuando varios niños que salían de la escuela primaria fueron atropellados deliberadamente por un automóvil.

El sospechoso, un hombre desempleado de 28 años proveniente de Tokio, fue detenido bajo cargos de intento de asesinato tras confesar que arremetió con intención de matar porque “ya no podía con todo”.
Un día escolar que terminó en horror
El hecho ocurrió poco después de la 1:30 p.m. del jueves 1 de mayo en una calle angosta de un vecindario residencial cercano a la escuela primaria municipal Senbon Shōgakkō (千本小学校).
Siete niños —todos de entre 7 y 8 años— fueron atropellados por un automóvil blanco que, según testigos, se aproximó lentamente al grupo y luego los embistió sin frenar.
El más grave de los heridos fue una niña de 7 años, quien sufrió fractura de mandíbula. Los otros seis niños resultaron con heridas leves pero fueron hospitalizados por precaución.
El conductor: un hombre sin antecedentes, pero con señales alarmantes
El detenido es Yazawa Yūki (矢澤勇希), de 28 años, residente de Higashimurayama (prefectura de Tokio) y desempleado.
En el momento del hecho conducía un automóvil rentado con matrícula de Osaka, aunque no estaba registrado como residente en esa prefectura.
Ante la policía, Yazawa confesó abiertamente:
“Todo me parecía insoportable. Quise matar a alguien, así que conduje directo contra el grupo de niños”.
Los investigadores buscan ahora determinar si su traslado a Osaka fue premeditado como parte del acto violento, si había planeado más ataques o si presentaba algún diagnóstico de salud mental no tratado.
Testigos: “Los niños lloraban atrapados bajo el auto”
Varios vecinos que presenciaron el ataque quedaron marcados por las escenas:
•Un hombre que salió corriendo al escuchar los gritos, relató:
“Vi a los niños llorando. Una niña tenía los pies atrapados bajo el neumático. El conductor no reaccionaba”.
•Una madre que fue a recoger a su hijo de primer grado, declaró:
“Mi hijo fue testigo directo. El coche se acercó tambaleando y después de arrollarlos, siguió avanzando sin detenerse. Está en shock desde entonces. Esto no debería pasar, apenas llevan un mes de clases”.
•Una adolescente que pasaba cerca comentó:
“El hombre estaba en estado de trance. Cuando los adultos gritaron que parara, retrocedió el coche, pero nunca bajó ni habló”.
La escena: una zona escolar convertida en zona de emergencia
El accidente ocurrió en una zona de velocidad reducida y tránsito restringido para proteger a los escolares.
Sin embargo, la tragedia expuso lo vulnerables que pueden ser los niños incluso en espacios diseñados para su seguridad.
Imágenes de medios de comunicación mostraron ambulancias y policías rodeando el área, mientras los servicios de emergencia trasladaban a los menores heridos en camillas.
El vehículo quedó detenido con daños visibles, rodeado por policías que acordonaron la escena.
Marco legal
Yazawa fue arrestado bajo sospecha de “satsujin misui” (殺人未遂) — intento de asesinato, una de las figuras penales más graves del sistema japonés.
Código Penal Japonés:
•Artículo 199 – Homicidio: “Quien mate a otra persona será castigado con pena de prisión no menor de cinco años y hasta cadena perpetua o muerte”
•Artículo 203 – Tentativa de homicidio: Se aplican las penas del Artículo 199, reducidas en función de que el acto no se consumó. Generalmente: Pena de prisión de entre 5 y 20 años, pero puede variar según la gravedad del hecho y la peligrosidad del autor.
Además, podrían aplicarse otros delitos conexos:
•Artículo 208 – Lesiones corporales (傷害罪, shōgai-zai): por causar daño físico a varias personas.
•Artículo 211 – Lesiones o muerte por conducción peligrosa: en caso de que se alegue que el vehículo fue usado como arma intencional, esto se considera agravante.
Agravantes que podrían pesar sobre la condena:
•Víctimas menores de edad e indefensas.
•Hecho perpetrado en un entorno escolar.
•Uso de un medio peligroso (vehículo a motor).
•Confesión que demuestra intención clara de matar.
¿Qué puede esperar el infractor?
Si se prueba que Yazawa actuó con intención de matar (como él mismo ha declarado), y considerando que dejó a una víctima con heridas graves, podría enfrentar una pena de 15 a 20 años de prisión, o incluso cadena perpetua si se considera el riesgo social que representa.
Sin embargo, si sus abogados argumentan incapacidad mental (por ejemplo, un trastorno psiquiátrico grave), podría ser declarado no imputable o recibir una sentencia reducida bajo tratamiento forzoso en un hospital psiquiátrico, conforme al Acta de Tratamiento Médico Penal (医療観察法).
Un llamado a reforzar la protección infantil
La comunidad de Osaka, y en particular las familias cercanas a la escuela Senbon, están devastadas. El incidente ha reavivado el debate nacional sobre:
•Salud mental y prevención de conductas violentas.
•Vigilancia en las zonas escolares.
•Protocolos de seguridad para trayectos escolares.
La policía y autoridades educativas están ofreciendo acompañamiento psicológico a los niños, familias y profesores afectados.

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