TOKIO.- En la actualidad, el yen japonés ha alcanzado un nivel de depreciación significativo frente al dólar estadounidense, situándose nuevamente en la franja de 150 yenes por dólar.
Este escenario económico, impulsado en parte por las políticas económicas propuestas por Donald Trump durante su transición como presidente de Estados Unidos, ha abierto oportunidades para los japoneses en el ámbito de los “Doru-date fukugyō – ドル建て副業 (trabajos secundarios en dólares).
Esta tendencia consiste en aprovechar la fuerte demanda de servicios y productos japoneses por parte de extranjeros, quienes están dispuestos a pagar precios competitivos en dólares, lo que resulta muy favorable para los japoneses debido al tipo de cambio actual.
Entre los ejemplos más destacados de estas actividades, se encuentran tareas como la coordinación de visitas, que pueden generar ingresos de hasta 1,733 dólares (aproximadamente 260,000 yenes), o la redacción de cartas en inglés por 400 dólares (alrededor de 60,000 yenes).
Además, plataformas de subastas internacionales se han convertido en un canal popular para que los japoneses vendan productos únicos del país, atrayendo gran interés y generando ingresos adicionales.
Muchos nipones aprovechan estas oportunidades para generar ingresos adicionales, mostrando cómo este fenómeno económico está siendo utilizado de manera creativa para mejorar la economía familiar en tiempos de cambios monetarios significativos.
EL DATO
Este tipo de iniciativas no solo benefician a quienes participan en ellas, sino que también reflejan la resiliencia y capacidad de adaptación de los japoneses frente a las fluctuaciones económicas globales.
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