Los inversionistas intentaron refugiarse en el dólar antes de que la tormenta arancelaria escale.
📍Tōkyō | 11 de Julio de 2025
El mercado de divisas en Japón vivió este viernes una jornada marcada por la tensión política y comercial internacional. 
El valor del yen japonés cayó con fuerza frente al dólar estadounidense, una señal de que los inversionistas están reaccionando con cautela —y cierto temor— ante los recientes anuncios del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
💱 ¿Cuánto cayó el yen?
A las 5 de la tarde, el tipo de cambio alcanzó los 146,85 ~ 146,87 yenes por dólar, lo que representa una caída de 59 sen respecto al día anterior.
Frente al euro, el yen también se debilitó ligeramente, cerrando en 171,66 ~ 171,70 yenes por euro, una depreciación de 5 sen.
🚨 ¿Qué pasó exactamente?
El detonante fue una declaración de Trump, quien anunció un arancel del 35% a productos importados desde Canadá.
Esa inseguridad se tradujo en una venta de yenes, ya que los inversionistas intentaron refugiarse en el dólar antes de que la tormenta arancelaria escale.
🧭 ¿Qué implica esta caída del yen para la vida diaria en Japón?
Aunque parezca una noticia financiera lejana, lo cierto es que un yen más débil tiene impactos muy concretos para quienes viven en Japón, tanto japoneses como extranjeros:
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🔺 Aumentan los costos de importación: productos como café, carne, ropa extranjera, gasolina o electrónica pueden encarecerse.
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✈️ Viajar al extranjero será más caro: el dólar y el euro cuestan más yenes, afectando a quienes planean vacaciones o negocios fuera del país.
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💸 Las remesas y pagos internacionales suben: quienes mandan dinero al extranjero desde Japón (por ejemplo, a sus familias) necesitarán más yenes para la misma cantidad en dólares.
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📈 Algunas empresas japonesas ganan: especialmente las grandes exportadoras (autos, maquinaria, tecnología) que venden al extranjero en dólares y luego repatrian ganancias. Sin embargo, este beneficio es de corto plazo si las barreras comerciales se endurecen.
🧩 Contexto más amplio: ¿qué está en juego?
Japón ya venía navegando una economía frágil, golpeada por una combinación de inflación importada, envejecimiento poblacional y consumo doméstico débil. Una escalada arancelaria podría frenar aún más su recuperación.
Además, este episodio pone en jaque los equilibrios diplomáticos y económicos entre Japón y Estados Unidos. Para el gobierno japonés, mantener una relación estable con su principal aliado estratégico es prioritario, pero ahora enfrenta la amenaza de un liderazgo estadounidense impredecible.
🔎 Conclusión
Lo ocurrido este viernes no es solo una fluctuación del mercado: es un recordatorio de lo frágil que es la estabilidad económica global en tiempos de discursos populistas y amenazas comerciales. Para los residentes en Japón, toca estar atentos, proteger el poder adquisitivo y seguir de cerca lo que ocurra en Washington.
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