Más de 35°C de diferencia entre el punto más cálido y el más frío
📍Tōkyō | 18 de noviembre
En una jornada marcada por contrastes extremos, Japón registró este lunes una diferencia térmica superior a 35 gradosentre el punto más cálido del archipiélago y el más frío. Mientras Okinawa y Ogasawara amanecían con ambiente casi veraniego, Hokkaidō se hundía abruptamente en temperaturas propias de enero. Una imagen clara de un otoño que simplemente no logra estabilizarse.
🔥 El verano que se resiste a irse
El valor más alto del país volvió a darse lejos de Honshū: 27.3°C en Ogasawara (Chichijima) a las 11:57. En pleno noviembre, esta cifra superó por más de un grado la media y se acercó a la línea roja del récord mensual.
En Okinawa, el día empezó como si fuera mediados de septiembre:
-
Yonaguni (Sonai): 25.3°C
-
Kitadaitō: 25.0°C
-
Minamidaitō: 25.0°C
-
Naha: 24.9°C
-
Miyakojima: 24.7°C
-
Ishigaki: 24.4°C
Varias estaciones quedaron a solo 0.5°C – 1.0°C de sus máximos absolutos para noviembre, lo que confirma una inyección de aire cálido procedente del Pacífico sur.
Los habitantes de las islas reportaron una sensación pegajosa, viento templado y cielos claros. El contraste con el calendario —a dos semanas del invierno meteorológico— resultó chocante.
🟧 Otoño templado sin extremos
En la franja central del país, desde Kyūshū hasta Kantō, el día se mantuvo templado y estable.
Las máximas rondaron entre 16°C y 21°C, mostrando un otoño más convencional.
Mientras el sur ardía y el norte se congelaba, el centro vivió un respiro térmico que ayudó a estabilizar la actividad agrícola y urbana. El contraste nacional se hizo aún más evidente aquí, en la “franja media” donde el clima no se inclinó ni al calor ni al frío.
❄️ Regreso del invierno
El norte del país vivió una mañana extremadamente fría.
Furano volvió a liderar las marcas más bajas, con un contundente –8.1°C a las 06:23.
Otros registros igualmente severos:
-
Ikutahara (Engaru): –7.6°C
-
Nayoro: –7.1°C
-
Nakashibetsu (Kushiro): –6.9°C
-
Kami-Furano: –6.8°C
-
Bifuka: –6.6°C
Las temperaturas quedaron 3°C a 6°C por debajo de la media estacional, un descenso abrupto que dejó escarcha en los campos, techos blancos y un aire cortante desde el amanecer.
Los habitantes describieron una sensación de invierno adelantado, con hielo en los parabrisas y neblina matinal, pese a que aún falta más de un mes para el verdadero pico invernal.
🟦 Frío profundo al norte de Honshu
Tohoku tampoco se quedó atrás en el desplome térmico.
En Aomori (Rokunohe), la mínima llegó a –6.1°C, cifra que obligó a cerrar ventanas, reforzar calefacciones y anticipar rutinas invernales.
El frío seco dominó gran parte de la región, dejando un ambiente duro pero estable.
🌏 Un país dos climas
La imagen del día es contundente: de 27.3°C en el Pacífico sur a –8.1°C en el corazón de Hokkaidō.
Una amplitud térmica que refleja un mes de noviembre desbalanceado, influido por corrientes cálidas persistentes y entradas frías potentes desde Siberia.
Mientras en Yonaguni la gente desayunaba con aire tropical, en Furano se formaba la primera capa sólida de escarcha del mes.
Japón, una vez más, quedó dividido por un eje climático que anticipa un invierno irregular y posiblemente extremo.

©2025 NoticiasNippon
