TOKIO.- La emperatriz emérita Michiko, quien tiene 89 años, fue dada de alta del Hospital de la Universidad de Tokio luego de haber estado ingresada tras sufrir una fractura en el fémur derecho (右大腿骨).
Ahora ha regresado a su residencia en el Palacio Sento, ubicado en el distrito de Minato, donde continuará su recuperación.
Durante algún tiempo, la madre del emperador Naruhito utilizará una silla de ruedas y se someterá a rehabilitación para volver a caminar por sí misma.
De acuerdo con sus asistentes, la recuperación de la emperatriz después de la cirugía ha sido satisfactoria. Ya ha comenzado los ejercicios de movilización de su pierna derecha, incluyendo prácticas para caminar con apoyo. Aunque el dolor ha disminuido, aún persiste.
Antes de su salida, expresó su agradecimiento al personal médico que la atendió, reconociendo sus esfuerzos y cuidado.
Ayer domingo emperatriz emérita salió en coche del hospital y llegó a su residencia aproximadamente a las 2:30. Según sus asistentes, el Emperador Emérito la esperaba en la entrada del palacio, mostrando alivio tanto él como su esposa por su alta médica.
El accidente ocurrió el 6 de octubre por la tarde, cuando la Emperatriz se cayó dentro de su residencia. Al día siguiente, el 7 de octubre, fue llevada al hospital para exámenes que revelaron la fractura en la parte superior de su fémur derecho. Fue ingresada de inmediato, y el 8 de octubre por la mañana se sometió a una cirugía para reparar el hueso fracturado.
Este incidente y la posterior recuperación de la Emperatriz Emérita han sido seguidos de cerca por la opinión pública en Japón, dado su estatus como figura de gran relevancia histórica y su avanzada edad. Aunque el pronóstico parece positivo, la rehabilitación y el proceso de adaptación a la movilidad asistida serán cruciales para su bienestar a largo plazo.
©NoticiasNippon