TOKIO.-La situación de los agricultores de arroz en Japón está en una crisis sin precedentes, con un aumento significativo de quiebras y cierres de negocios durante los primeros ocho meses de 2024.
Según un informe de Teikoku Databank publicado el 5 de septiembre, de enero a agosto de 2024 se registraron 34 casos de quiebras y cierres de agricultores de arroz, una cifra que ya casi iguala el total de 2023 y se espera que aumente aún más.
Los principales factores que contribuyen a esta crisis incluyen el aumento de los costos de los insumos de producción, la incapacidad de trasladar estos costos a los precios de venta, la disminución del consumo de arroz y el envejecimiento de la población agrícola.
Factores Claves de la Crisis
- Aumento de los costos de producción: El informe del Ministerio de Agricultura, Silvicultura y Pesca señala un incremento del 1.2 veces en los costos de los insumos agrícolas en comparación con el promedio de 2020, con los fertilizantes, principalmente importados, subiendo un 1.5 veces, mientras que los costos de energía y agroquímicos aumentaron también considerablemente. Estos aumentos han impactado negativamente la rentabilidad de los agricultores.
- Dificultad para trasladar los costos a los precios de venta: Aunque los precios del arroz han subido ligeramente, no han sido suficientes para compensar los altos costos de producción. Esto se debe a la disminución continua en el consumo interno de arroz, lo que limita la capacidad de los agricultores para ajustar los precios y cubrir sus costos, dejando a muchos sin margen para reinvertir en la próxima temporada.
- Envejecimiento de los agricultores y falta de sucesores: Muchas explotaciones arroceras en Japón son pequeñas y están gestionadas por agricultores de edad avanzada. La falta de jóvenes dispuestos a continuar con la producción agrava la situación, aumentando el riesgo de cierre de más granjas.
Panorama
Quiebras y Cierres de Empresas Agrícolas (2010-2024):
- Este gráfico ilustra el número de quiebras y cierres de operaciones agrícolas desde 2010 hasta 2024, centrándose en la agricultura de arroz.
- El número de quiebras ha aumentado significativamente, alcanzando un máximo de 35 casos en los primeros ocho meses de 2024, lo que marca el ritmo más alto registrado.
- Las barras muestran una tendencia de incremento en los últimos años, con un aumento notable a partir de 2020. Esto refleja una presión creciente sobre los agricultores debido a factores económicos y posiblemente ambientales.
Aumento de Precios de Insumos Agrícolas (2014-2024):
- Muestra la tendencia de los precios de los insumos necesarios para la agricultura, como fertilizantes y pesticidas, desde 2014.
- Los precios de los fertilizantes han experimentado un alza pronunciada, superando los niveles de otros insumos, lo que sugiere un fuerte impacto en los costos de producción agrícola.
- Además, la línea gris muestra que los precios de los materiales agrícolas se han mantenido elevados, mientras que los precios de intercambio del arroz (60 kg) han tenido fluctuaciones pero no han seguido el mismo ritmo de aumento que los costos.
Efectos y Perspectivas Futuras
El análisis de Teikoku Databank destaca que las pequeñas explotaciones están especialmente en riesgo, ya que operan con márgenes extremadamente reducidos.
Por el contrario, las grandes corporaciones agrícolas han logrado mantener cierta rentabilidad gracias a la gestión de extensiones más amplias de tierra, creando una marcada polarización en el sector.
Esta brecha podría ampliarse, aumentando la desigualdad entre los agricultores rentables y los que no lo son.
En medio de una escasez nacional de arroz y el aumento de precios, la situación de los agricultores arroceros pone en peligro la estabilidad del suministro de este alimento básico en Japón.
A menos que se tomen medidas para ayudar a los pequeños agricultores a adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado y reducir su dependencia de insumos costosos, se espera que el número de quiebras continúe en aumento.
Medidas Propuestas
Las organizaciones agrícolas, como la Japan Agricultural Cooperative (JA), están implementando programas de apoyo para atraer nuevos agricultores y mitigar la escasez de mano de obra.
Se están fomentando técnicas de producción que reduzcan la dependencia de insumos caros, como la promoción de arroces de alto valor sin pesticidas, que han mostrado una demanda creciente.
Sin embargo, estas iniciativas aún no son suficientes para contrarrestar los desafíos estructurales del sector.
La situación exige una respuesta integral que aborde tanto los desafíos económicos como los estructurales.
Es necesario un mayor apoyo gubernamental, la promoción de prácticas agrícolas sostenibles y la incentivación de la entrada de nuevos agricultores jóvenes, para evitar una crisis aún mayor en el suministro de arroz en Japón.